Fueron muchas las veces que, durante la pandemia, escuchamos el término Síndrome de Burnout o estar quemado relacionado con el personal sanitario. Sin embargo, el también conocido como Síndrome de Desgaste Ocupacional no es algo propio o provocado por la pandemia, sino algo que lleva preocupando a los profesionales desde hace décadas.
Médicos, psiquiatras, psicólogos, sociólogos como Z. Bauman e incluso filósofos han puesto el foco sobre él. En este otro post, hablamos de la relación que establecía el filósofo Byung-Chul Han entre el estilo de vida contemporáneo y este y otros trastornos mentales.
¿Qué es el Síndrome de Desgaste Ocupacional?
Uno de los primeros en describir esta afectación fue el psicólogo Herbert Freudenber. En consulta, observó como muchos de sus pacientes sufrían un cuadro similar de síntomas compuesto por:
- Progresiva pérdida de energía.
- Desmotivación.
- Falta de interés por el trabajo.
- Agotamiento.
- Síntomas de ansiedad y depresión.
Tiempo después, las psicólogas Christina Maslach y Susan Jackson dividieron este síndrome en tres dimensiones que son las que actualmente utiliza la OMS en su definición.
Definición del trastorno según la OMS
El Síndrome de Desgaste Ocupacional o Burnout está incluido en el CIE-11 en el epígrafe Factores que influyen en el estado de salud y lo definen como “resultado del estrés crónico en el lugar de trabajo que no se ha manejado con éxito”. Además, indican que se caracteriza por tres dimensiones:
- sentimientos de falta de energía o agotamiento;
- aumento de la distancia mental con respecto al trabajo, o sentimientos negativos o cínicos con respecto al trabajo;
- una sensación de ineficacia y falta de realización.
Posteriormente aclaran que “el síndrome de desgaste ocupacional se refiere específicamente a los fenómenos en el contexto laboral y no debe aplicarse para describir experiencias en otras áreas de la vida.“
Test de Burnout para la población general en castellano (CBB-M)
Pinchando en este enlace, podréis autocompletar el Cuestionario Breve de Burnout Multifactorial (CBB-M: Pérez-Fuentes, M. C.; Molero Jurado, M. M.; Martos Martínez, Á. & Gázquez Linares, J. J. (2018)), una herramienta válida para la evaluación global de este síndrome.
Independientemente del resultado, nunca está de más consultar con un profesional de la salud mental si se considera que puede llegar a haber un problema real.
Si tienes cualquier duda o pregunta al respecto, puedes dejarla en los comentarios y nuestros psicólogos la respondarán lo más rápido les sea posible.
Fuentes:
Organización Mundial de la Salud. CIE-11 (ver. 05/2021). (https://icd.who.int/browse11/l-m/es)