Cada vez son más las habilidades que nos requieren para que nos admitan en un puesto de trabajo. Necesitamos tener un buen control sobre los medios informáticos, la publicidad, el trabajo en equipo, etcétera. Y además, en los tiempos que corren en los que lo visual cada vez esta más de moda (al igual que los cursos de formación o las mentorías), es necesario, también, manejarse correctamente a la hora de hablar en público.
Y es que, ¿a quién no le da miedo perder el hilo del discruso? ¿quién no teme trabarse ante una palabra de difícil pronunciación? ¿Quién no ha soñado con quedarse sin voz o paralizado cuando tenía que dar un discurso? Quizás las personas acostumbradas a hacerlo habitualmente ya no tengan dichos pensamientos aunque también es muy posible que en algún momento los tuviesen.
Por todo ello, hoy vamos a dedicarle un artículo a la glosofobia o miedo a hablar en público.
En este artículo, repasaremos el origen del término y su significado. También ahondaremos en las posibles causas de esta fobia específica y su sintomatología más común. Por último, hablaremos acerca de las herramientas de las que dispone la psicología para su tratamiento.
Índice
¿Qué es la glosofobia?
El término «glosofobia» se forma a partir de dos elementos etimológicos: «gloso» y «fobia». «Gloso» proviene del griego antiguo «glōssa», que significa «lengua», mientras que «fobia» deriva del griego «phobos», que se traduce como «miedo» o «temor irracional». Por lo tanto, la glosofobia se refiere al miedo o la aversión intensa y persistente a hablar en público o a situaciones en las que se requiere hablar en presencia de otras personas.
Se trataría, por tanto, de una fobia específica. Para ser diagnosticada como tal, según el DSM-V, deben estar presentes también las siguientes condiciones:
- El miedo a hablar en público es persistente, excesivo, desproporcionado e irrazonable
- Sientes miedo cada vez que estas expuesto a esas situaciones
- Asumes que las sensaciones de miedo que tienes y los pensamientos son desproporcionados con respecto a las amenazas reales u objetivas
- O bien directamente evitas ese tipo de situaciones o las soportas bajo la presión de un miedo intenso
- Dicho miedo interfiere con el desarrollo normal de tu vida personal, laboral o social.
- Llevas más de seis meses padeciendo esta sintomatología
Causas del miedo a hablar en público
En la mayoría de situaciones resulta sumamente difícil identificar cuál es el factor específico o determinante que marca el origen de una fobia.
Por ejemplo, este miedo irracional puede estar relacionado con diversos factores, como el miedo al juicio o la crítica de los demás, la inseguridad personal o experiencias previas negativas en situaciones de habla en público.
También, una historia de aprendizaje y condicionamiento inapropiados pueden ser la causa directa de la aparición de este trastorno. Por ejemplo, si una persona ha experimentado situaciones previas de bloqueo durante una exposición, si ha sufrido burlas sobre su desempeño a la hora de dar un discurso, confusiones, etcétera.
Síntomas de la glosofobia
Algunos de los síntomas más habituales que pueden manifestarse en casos de glosofobia incluyen:
- Pensamientos intrusivos y repetitivos sobre el momento en el que se deba hablar en público (una reunión de vecinos, una formación, una entrega de premios…)
- Evitación de situaciones en las exista la posibilidad de hblar en público, pudiendo conllevar esta conducta problemas para la persona afectada (pérdida de empleo, suspender una asignatura, etcétera).
Cuando este tipo de situaciones no se pueden evitar, entonces las personas que padecen glosofobia sufrirán los mismos síntomas de la ansiedad:
- Mareos
- Dolor de cabeza
- Visión borrosa y/o visión de moscas volantes
- Náuseas
- Palpitaciones
- Sudoración
- Dificultad para respirar
- Dolor en el pecho
- Desrealización
- Necesidad de escapar
- Ataque de pánico
Tratamiento para la glosofobia
La glosofobia requiere de un tratamiento multi-componente cognitivo-conductual para intentar aplacar los distintos tipos de síntomas en los que se manifiesta.Para controlar los síntomas fisiológicos generados por la ansiedad, se requiere de técnicas como la respiración diafragmática o profunda. Se trata de una intervención sencilla, de rápido aprendizaje, eficaz y aplicable a casi cualquier situación.
En el caso de los síntomas conductuales, la técnica más potente es la exposición gradual con prevención de respuesta acompañada de autoinstrucciones. Se trata de una técnica cognitivo conductual en la que se procede a la exposición jerarquizada (de menor a mayor ansiedad) del estímulo fóbico junto al entrenamiento en autoinstrucciones de Meichenbaum, cuyo objetivo es provocar cambios en la conducta manifiesta de la persona mediante verbalizaciones internas.
En el caso de la glosofobia, se trataría de exponer a la persona poco a poco a entornos y situaciones relacionadas con el mar. En un primer momento, se puede optar por la exposición en imaginación y visualización de una conferencia. También sería necesario exponer más adelante a la persona, mediante la prevención de respuesta a, por ejemplo, dar un discurso frente a personas conocidas, grabarse realizando uno para detectar posibles errores, etcétera.
Por último, la psicoeducación dirigida a entender que es y cómo funciona la ansiedad, la reestructuración cognitiva para eliminar las ideas irracionales y modificar las anticipaciones catastrofistas propias de las fobias. En el caso de la glosofobia éstas tendrían que ver con la idea de que el resultado va a ser avergonzante o que uno no es capaz de realizar un discurso. Este tipo de ideas no son realistas y mediatizan la vida de esas personas. Por este motivo se hace necesario trabajar sobre ellas de manera exhaustiva.
Consejos para hablar en público
Aquí tienes algunos consejos para afrontar el miedo a hablar en público:
- La preparación es clave para ganar confianza. Investiga y conoce bien el tema sobre el cual vas a hablar. Practica tu discurso varias veces y familiarízate con el contenido. Cuanto más preparado estés, más seguro te pasarás al hablar.
- Visualízate hablando con confianza, manteniendo contacto visual y recibiendo una respuesta positiva de la audiencia.
- Si te sientes abrumado por grandes multitudes, comienza practicando en situaciones más pequeñas y cómodas. Puedes hablar frente a amigos, familiares o en grupos más reducidos. A medida que te vayas sintiendo más cómodo, puedes ir aumentando gradualmente el tamaño de la audiencia.
- Antes de hablar en público, dedica unos minutos a practicar ejercicios de respiración profunda y relajación. Esto ayudará a calmar tu mente y cuerpo, reducir la ansiedad y el nerviosismo.
- En lugar de centrarte en tus propios miedos y preocupaciones, concéntrate en el mensaje que deseas transmitir. Esto te ayudará a desviar tu atención de tus propias inseguridades.
- Conecta con la audiencia: Establece contacto visual con los miembros de la audiencia y trata de interactuar con ellos. Haz preguntas, invítalos a participar y mantén una actitud abierta y receptiva. Sentir que estás conectando con tu audiencia puede aumentar tu confianza y reducir la sensación de amenaza.
- Practica el discurso en público: Busca oportunidades para practicar hablar en público. Cuanto más te expongas a situaciones de hablar en público, más confianza irás ganando. Empieza, si quieres, frente al espejo.
- Busca apoyo y feedback: Habla con personas de confianza sobre tu miedo a hablar en público y busca su apoyo, calses de oratoria para mejorar tus habilidades, etcétera.
Recuerda que superar el miedo a hablar en público es un proceso gradual. No te desanimes si enfrentas dificultades al principio. Con práctica constante y exposición gradual, puedes desarrollar habilidades sólidas y ganar confianza al hablar en público.
Esperamos que el artículo les haya sido de utilidad. Si tienen alguna duda o comentario, no olviden dejarlo en la caja que se encuentra al final de esta página. Nuestro equipo de psicólogos tratará de darle respuesta tan pronto como les sea posible.